Que suelo ir de regreso cuando hay que partir.
Reiterado e irreflexivo puñado de sinsentidos:
¡Te Amo!... y estoy más que enloquecido por ti
Que en tu ausencia ya no entiendo como vivir.
Fanático, incondicional y devoto de tu cariño:
¡Te Amo!... y estoy más que necesitado de ti.
Que procurar tu felicidad es mi esencial fin.
Hidalgo, leal, y tu gozo, mi noble estandarte:
¡Te Amo!... y estoy más que pendiente de ti.
Que soy simplemente tuyo desde que te conocí.
De tus pasos se alimenta mi encantado camino:
¡Te Amo!... y estoy más que enamorado de ti.